Este es mi pequeño homenaje a esa persona que supo como nadie, decir las cosas que hay que decir, hacerse valer, y además contar con la simpatía de una inmensa mayoría, que estuvieran o no de acuerdo con las ideas bien claras y definidas que no escondía nunca, le profesaban un profundo respeto, y por que no, una gran admiración.
José Antonio, fue un ser excepcional, tocado con la extraña varita de la genialidad, y al que por una u otra causa, mucha gente define simplemente como alguien cercano, muy “campechano”.
Puede que sea esa manera suya de pasar por la vida, tan del pueblo, tan al pan pan y al vino vino, lo que le hizo genial.
Un hombre que igual se ponía la mochila y nos iba descubriendo esa España llana, donde las tradiciones aun se conservan intactas, como nos cantaba un "Aragón", o ese "Canto a la Libertad", que pone la carne de gallina, (y que yo espero sea himno de Aragón), o les mandaba “a la mierda” a esos Srs. Diputados que creyéndose Dios, se permitían burlarse del “Abuelo”.
Siempre estarás en el corazón de la buena gente, porque personas como tu José Antonio, tendría que haber un ciento y mas, porque nos enseñaste que se puede no estar de acuerdo con el de enfrente, y tomarte unas cañas con el, y que no pasa nada por eso, y que defendías como nadie tus razones y se te respetaba.
Como te hiciste valer, y cuanto te vamos a echar de menos amigo.
Por eso y un millón de cosas más, te queríamos José Antonio, por eso y un millón de cosas mas, te escribo estas palabras. Hasta siempre compañero…..
Esta jota la cantaron para recordarte seguro que la estarás escuchando en algún lugar.
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